Materiales:
- Invitación para la reflexión de la mañana
- Invitación para la reflexión de la tarde
- Otros textos de apoyo:
Ecos:
Queridos amigos,
Hoy comenzamos nuestra andadura (que es la vuestra también) hacía la NAO, y la iniciamos con la lectura del día, que nos invitaba al seguimiento desde esa promesa del ciento por uno… Seguir a Jesús, es recibir el ciento por uno de todo aquello que “dejas” por seguirle ¿lo sabes, lo sientes, cómo lo vives?
Lectura: Mc. 10, 17-31
La verdad es que muchas preguntas nos han invadido hoy, pero lo más importante, es que en el corazón de cada uno, ha sido acogida, orada y compartida, aquella que sentía, le daba más luz, para poder responder a esa llamada: la SED que en lo hondo nos ALUMBRA.
Ha sido un ir y venir, rico, lleno de vida, de encuentros, de novedad, de Dios, sobre todo de Dios: Isabel, Expedita (Misionera Comboniana), Mabel, Ramón, Carmen, Consuelo, Patri (Comunidad Tierra de Encuentro), Carmen Murillo (Pueblo de Dios, desde Huelva), Kitty (desde Valencia), Emilio Aragón, Toñi e Iluminada (Adoratrices), Vicente y Rosi (Pueblo de Dios), Juan Carlos y Luci, Isabel…
Muchos hemos caminado juntos hacia la Fuente, corrido hacia la Fuente…
porque no es lo mismo contemplar la Fuente que llegar a ella muertos de sed,
y así llegábamos.
Y ¿qué sed nos traía? ¿qué sed tenemos?
La sed de trasmitir…esa sed que une y que forma un río en el que estamos TODOS
El anhelo, la inquietud de El, porque se que El me sacia…
Vivir en su voluntad, esa es mi sed, algo que estoy llamada a confirmar y renovar cada día…
Eso sí soy: SED, de coherencia, de discernimiento, de saber qué me toca…
El es más fuerte que yo y me venció, me enamoró, y en abundancia me dio lo que necesitaba en cada momento…
La sed, de SER, de ser en El y con El, de SER con todos, y vivir desde ese SER cada día, y que sea SER lo que a otros atraiga hacia esta misma SED…
Lectura: Jn. 1, 1-18
Y desde esta Sed muchas inquietudes, cuestionamientos, esperanzas, deseos, anhelos, luces, dudas… se han compartido:
Nos volvemos Fuente en la Fuente, el cauce se confunde con la Fuente
Cuánto más camino más descubro mi fragilidad: soy vasija de barro, pero soy consciente del tesoro que hay en mí.
¿Quién es Dios para mí??
Dios se manifiesta en las capacidades de todo ser humano, y en ellas, anhela plenitud
Retomar el valor del Pueblo, un valor histórico para toda la humanidad
Experimentar que Dios en con nosotros y en nosotros, somos en El y con El… vivir desde la divinidad y el compromiso que esta experiencia supone.
Dt. 30, 11-20 “Elige la vida y vivirás…”
Peregrinar, ser peregrinos en la vida, no asentarnos, movernos, buscar el agua, ponerse en camino, estar siempre disponibles y dispuestos…
Creer que ya nos podemos definir en quien somos, nos hace “morir” porque cerramos en nosotros el cauce de lo nuevo que está por venir, que puede fluir, del agua que mana incesante y nueva de la Fuente
Moverse sin poseer, solo amar, porque cuanto menos tenemos menos tememos que perder, y cuanto más tengo más esclava soy de lo que tengo, más temo perder lo que tengo…
La comunidad como lugar donde volver a la Fuente, donde beber de la Fuente que mana en el hermano, donde compartir la vida que brota de la Fuente, la fe que me hace permanecer en la Fuente… La Comunidad, no MI comunidad…
Acabamos la mañana orando desde el canto y estilo de Taizé con otra nueva invitación:
VEN, BEBE Y SIGUE TU CAMINO
«SE PASA JUNTO A TAIZÉ COMO SE PASA JUNTO A UNA FUENTE…
…EL VIAJERO SE DETIENE, BEBE Y CONTINUA SU RUTA.Los hermanos de la comunidad, ya lo sabéis, no quieren reteneros. Ellos quieren, en la oración y el silencio, permitiros beber el agua viva prometida por Cristo, conocer su alegría, discernir su presencia, responder a su llamada; después volver a partir para testimoniar su amor y servir a vuestros hermanos en vuestras parroquias, vuestras ciudades y vuestros pueblos, vuestras escuelas, vuestras universidades, y en todos vuestros lugares de trabajo.»
Dialogar y poner en sus manos nuestra alma sedienta. Y en cada «conexión», en cada vaciarnos confiados
Dejarnos empapar del AGUA VIVA QUE MANA DE SU FUENTE DE VIDA ETERNA…
«De noche iremos de noche, que para encontrar la fuente, solo la sed nos alumbra.»
Y tras compartir la mesa, los quehaceres y sentires de la vida cotidiana de cada uno, el de donde vengo y a donde intuyo debo ir, seguimos dejándonos tocar, alcanzar, interrogar, renovar, redescubrir, por el texto del Prólogo de Juan, recogiendo al final de la tarde más luces, novedades, inquietudes…
Hoy y siempre, sigo intentando no dejar de tener Sed… porque al beber de su Fuente en tantos compañeros y maestros de camino, no puedo sino seguir deseando el gusto de lo recibido.
¿Cuáles son los tiempos de Dios? ¿Corresponden con los míos, me impaciento, espero?
Jesús es hoy la tienda del Encuentro, donde hablar con el Padre como un amigo, y con el somos Tienda, Templo… donde adorar, ante cada ser humano, al Dios que buscamos y en lo hondo anhelamos.
Todo tiempo es tiempo de Dios? ¿Qué necesito de Dios en el tiempo que estoy viviendo para sentir que es de Dios, que estoy haciendo su voluntad?
La ilusión es el motor que puede cambiar nuestra vida, es la ilusión de lo que se busca la que puede cambiar nuestro presente, nos pone en movimiento hacía eso que soñamos.
Solo desde la sed de más, se alcanza lo que se sueño, a la vez que se descubren los límites
Descubrir que en El, se alcanza el “poder” de todo, que todo lo soñado puede ser posible, pero ese TODO, esa plenitud, pasa por nuestros límites, por el tamaño de la vasija que somos.
Confiar en que El encontrará el momento en el que podamos entender lo que en otras ocasiones no hemos entendido… Dios no llega cuándo le esperamos pero nunca llega tarde… SABER ESPERAR, CONFIAR
“HAGASE EN MI,
CUANTO QUIERAS, COMO QUIERAS, DONDE QUIERAS,
AQUÍ ESTOY PARA VIVIR, TU PALABRA”
“Se anhela lo que ya se conoce,
Se busca, lo que alguna vez se ha tenido
Se tiene sed, cuando uno ya ha gustado del agua, cuando sabes que eres agua.
Tenemos sed, porque somos, en su mayoría, agua.
Buscamos volver a la fuente, porque la sed nos atrae… porque no podemos vivir sin el agua, que ya somos.
Y es que a Dios no podemos alcanzarle por ningún otro lugar que no sea en el hombre y desde el hombre,
porque juntos, desde el principio, SOMOS DIOS
“porque la Palabra era Dios, y la Palabra se hizo carne…”
Volver a la Fuente, es entrar en lo más hondo de nosotros mismos
y constatar en nuestra vida, en nuestras carnes,
que tenemos experiencia de Dios,
que Dios es en nosotros,
y que haberle conocido, vivido, encarnado,
nos atrae a volver y volver, y ansiar permanecer,
por aquello que de bueno es para nuestra vida,
y por aquello bueno, que sentimos, puede aportar a la vida de todos.
Que Dios nos habla y se dice, en la vida, en lo cotidiano
en nuestra historia, en la historia desde el principio, aquí en la Tierra como en el cielo”
SONETO Sólo tú mi fuente… en el río.
El río es el camino, es la vida
que no para y descansa en hospedaje,
y sólo ha de admitir el caudillaje
de quien de un pleno amor sea la medida.
Y así desde el comienzo, de partida,
no permita que nadie me aventaje,
siendo igual mensajero que mensaje,
de un amor que es comida y es bebida.
Soy un río que no tiene afluente,
e ir solo al mismo mar me desafío;
de quedarme sin agua soy consciente,
si del cauce que soy me desvío;
mas siendo de mi río tú su fuente,
tu fuente se hace una con mi río.
Miremos, ¿que miedos tengo para mirar a la fuente?, ya pase lo primero, eso me da seguridad sobre todo lo que viene, asi me siento, ¿de que estan hechas esas seguridades?, volver, coger el carruaje y ponerme en el principio otra vez, mirar cual ha sido mi recorrido y decir ¿cual es mi fuente?.
¿Es de locos pensar que siempre estaremos en el principio?
¿Quien nos educara a volver continuamente a la fuenta para ser sencillos y limpios de corazon?
“…Tenemos que avanzar hacia nuestra fuente auténtica, nuestra
naturaleza verdadera, nuestro núcleo divino…
Los seres humanos conservan la intuición de que existe un lugar donde toda
pregunta quedará contestada. Cada vez es mayor el número de personas que
va en busca de ese lugar.”
¿Lo conoces, lo sientes, lo intuyes?
¿Qué sientes cuándo habitas ese lugar?
Aquí está la clave.
avanzar, buscar la fuente auténtica que está dentro de nosostros y nos une a todos y a todo, lo presente, lo pasado y lo futuro. Todos Es en aquel que es el YO SOY
Pepe